Del Amor y Otras Drogas…

Posdata, te quiero

La escritora canadiense Isabelle Tessier le escribió una carta a un chico con el que había salido durante unos meses y que había partido de viaje por tiempo indeterminado. “Le escribí por San Valentín mientras estaba en la otra punta del mundo”. En ella le decía que quería “estar soltera contigo” y defendía una relación de pareja en la que cada uno pudiera mantener su vida y su independencia.

El pasado mes de julio adaptó esta carta y la publicó en su blog de la edición de Québec de The Huffington Post. Ese texto suma más de 95.000 “Likes” en Facebook y se ha traducido a cinco idiomas, incluyendo el español.

Quiero estar soltera, pero contigo

Quiero estar soltera contigo.

Quiero que vayas a tomarte una cerveza con tus amigos, para que al día siguiente tengas resaca y me pidas que vaya a verte porque te apetece tenerme entre tus brazos y que nos acurruquemos. Quiero que hablemos en la cama por la mañana de todo tipo de cosas, pero algunas veces por la tarde; quiero que cada uno haga lo que quiera durante el día.

Quiero que me hables sobre las noches que sales con tus amigos. Que me digas que había una chica en el bar que te ponía ojitos. Quiero que me mandes mensajes cuando estés borracho con tus amigos para que me digas chorradas, sólo para que puedas estar seguro de que yo también estoy pensando en ti.

Quiero que nos riamos mientras hacemos el amor. Que empecemos a reírnos porque estamos probando cosas nuevas y no tienen sentido. Quiero que estemos con nuestros amigos, para que me cojas de la mano y me lleves a otra habitación porque ya no puedes aguantarte más y tienes ganas de hacerme el amor ahí mismo. Quiero intentar permanecer en silencio porque hay gente y nos pueden oír.

Quiero comer contigo, que me hagas hablar sobre mí misma y que tú hables sobre ti. Quiero que discutamos sobre cuál es mejor, la costa norte o la costa sur, el barrio occidental o el oriental. Quiero imaginar el apartamento de nuestros sueños, aun sabiendo que probablemente nunca vivamos juntos. Quiero que me cuentes tus planes, esos que no tienen ni pies ni cabeza. Quiero sorprenderme diciendo: «Coge tu pasaporte, que nos vamos».

Quiero tener miedo contigo. Hacer cosas que no haría con nadie más, porque contigo me siento segura. Volver a casa muy borracha después de una buena noche con amigos. Para que me cojas la cara, me beses, me uses como tu cojín y me abraces muy fuerte por la noche.

Quiero que tengas tu vida, para que decidas irte de viaje unas semanas por puro capricho. Para que me dejes aquí, sola y aburrida, deseando que salte tu carita en Facebook diciéndome «hola».

No quiero que siempre me invites a tus juergas, y no quiero invitarte siempre a las mías. Así, al día siguiente puedo contarte cómo fue la noche y tú puedes contarme la tuya.

Quiero algo que sea simple y, a la vez, complicado. Algo que haga que, a menudo, me haga preguntas a mí misma, pero que, en el momento que esté contigo en la misma habitación, desaparezcan todas las dudas. Quiero que pienses que soy guapa, que estés orgulloso de decir que estamos juntos.

Quiero que me digas te quiero y, sobre todo, poder decírtelo yo a ti. Quiero que me dejes andar por delante de ti para que puedas ver cómo se mueve mi culo de lado a lado. Para que me dejes arañar las ventanas de mi coche en invierno porque mi culo se contonea y eso te hace sonreír.

Quiero hacer planes sin saber si al final los realizaremos. Estar en una relación clara. Quiero ser esa amiga con la que adoras quedar. Quiero que sigas teniendo el deseo de tontear con otras chicas pero que me busques a mí para terminar la noche juntos. Porque quiero ir contigo a casa.

Quiero ser esa a la que le haces el amor y después te quedas dormido. La que te deja en paz cuando estás trabajando y a la que le encanta cuando te pierdes en tu mundo de música. Quiero tener vida de soltera contigo. Porque nuestra vida de pareja sería igual que nuestras vidas de solteros de ahora, pero juntos.

Un día, te encontraré.


Una carta polémica que ha suscitado todo tipo de comentarios, las que están a favor son tildadas poco menos que de romanticonas, machistas y otras lindezas…

Y es que cada quien la interpreta según su propia realidad, en una sociedad en la que el paradigma del amor se basa en el romanticismo más casposo, desde el cine y la música nos siguen vendiendo el: «Sin ti no soy nada», pensar que una relación sin ataduras puede sobrevivir se hace muy cuesta arriba para la mayoría.

Para mi que hace muchos años que disfruto de mi soltería, esa sería una buena propuesta de relación, con algunos matices, [juergas, borracheras, resacas…] pero desde luego, estoy totalmente de acuerdo en que una buena relación no es la fusión de dos personas, sino compartir respetando por sobre todas las cosas la individualidad del otro.

Estoy escribiendo este post un domingo frío de principios de otoño y si pienso en el Amor viene a mi mente la que para mi, es la más Bella canción de Amor de todos los tiempos: «Paraules d’Amor» de Joan Manuel Serrat.

Palabras que hacen recordar la infinita ternura del Primer Gran Amor…

Os la comparto interpretada Magistralmente por Silvia Perez Cruz y Toti Soler.